Palabras de nuestro querido Elbio:
Estos momentos de evocaciones y de reflexiones, nos recuerdan que la vida es un largo tránsito entre la nostalgia y la esperanza.- Son momentos de llevar la memoria a los primeros tiempos, al de los fundadores, de los pioneros, a los ásperos, humildes y silenciosos comienzos de Empalme Olmos.- Son momentos de dejar una flor en el recuerdo de quienes ya no están entre nosotros.- Pero también son momentos de detenerse en valorar cuánto se ha logrado en este presente que se viene construyendo, minuto a minuto, por autoridades locales, dirigentes de la comunidad, organizaciones sociales, culturales, religiosas y deportivas, comerciantes, maestros y profesores, agricultores, profesionales, trabajadores y vecinos anónimos.- Gracias a todos ellos, Empalme Olmos está instalado en el siglo XXI.- Queda, si duda, mucho por hacer.- No basta con lo que ya se ha logrado, que es mucho y es bueno.- .- Ese futuro, con los que los empalmeolmenses soñamos, se conseguirá con paciencia y persistencia, con dedicación, con esfuerzo, con los pesares y alegrías que siempre acompañan el tránsito de la gente; con cariño al pago donde transcurre la vida de cada uno.- Ese futuro se conseguirá porque se quiere vivir juntos, porque se quiere progresar juntos, porque se quiere construir juntos una sociedad donde se afirme la posibilidad de dialogar, de hablar; donde se consagre el equilibrio entre la libertad y la seguridad, entre acuerdos y discrepancias.- Empalme Olmos puede ser la escuela donde se vaya aprendiendo, día a día, el difícil arte de vivir.- O, mejor, el difícil arte de convivir.-
Recordemos, pues, el pasado, ansiosos del bien futuro.-
¡Felicitaciones por estos primeros ciento trece años, empalmeolmenses.!.-
Me siento orgulloso de sentirme empalmeolmense.-
Dr. Elbio V. Moreira Piegas